2021-04-12 21:44:59
Si uno está buscando documentos de la iglesia con evidencias del conocimiento previo del abuso sexual por de sacerdotes rara vez encontrará las palabras pedófilo, abusador, sexo, o cualquier otra referencia directa a relaciones sexuales reales de comportamiento abusivo. Incluso en correspondencia con palabras clave de proveedores médicos se utilizaron eufemismos. Todos los términos eufemísticos o frases utilizadas para describir a un sacerdote que está abusando sexualmente los menores enumerados a continuación fueron encontrados en, iglesia.
Registros hospitalarios de 1982 dan la diagnóstico de " esquizofrenia paranoide "a un sacerdote que había sido tratado dos veces antes por "depresión". "Admitió un historial de abuso de al menos cinco niños al año durante el curso de su ministerio. La razón de esta categorización tenía lógica: la decisión consciente de un sacerdote era ser célibe. No podía ser sacerdote si no lo prometía. Como quería ser clérigo y su comportamiento era diametralmente opuesto a este deseo, tenía que tener una "personalidad dividida". "Su comportamiento demostró principalmente que estaba "loco" y la esquizofrenia era un diagnóstico disponible en ese momento.
Historia del tratamiento psiquiátrico de sacerdotes con problemas sexuales, incluyendo el abuso de menores demuestra claramente que ALCOHÓLICO era el nombre dado a estos hombres-en parte porque estaban bebiendo demasiado y causando-como se dijo en la iglesia. Pero en la verdad, decenas de sacerdotes y obispos en este grupo estaba actuando sexualmente con niños o adolescentes. Beber era un diagnóstico más benigno - menos perjudicial para la reputación del clero y la iglesia que cualquier reconocimiento directo de la participación sexual. No era políticamente tolerable utilizar la palabra pervertido.
Durante mis años de formación como personal de un hospital católico era común que un paciente sacerdote que había abusado sexualmente de menores fuera diagnosticado con depresión. Y de hecho, la mayoría sufría de síntomas depresivos.
Habían sido capturados. la policía o alguna autoridad de la iglesia notaron el comportamiento sexual y tuvieron que hacer algo al respecto.
A veces el elemento sexual en el comportamiento era demasiado obvio o público para negarlo al ingresar en un hospital psiquiátrico. Incluso entonces el hecho de que un niño había sido abusado por un sacerdote tenía que ser suavizado y cubierto tanto como fuera posible. El sacerdote infractor fue tratado por un trastorno psiquiátrico de HOMOSEXUAL (antes de 1973 se consideraba la homosexualidad como un trastorno)
En la década de 1970 centros de tratamiento para el clero como la Casa de la Afirmación eran establecido con personal de sacerdotes y otros Trabajadores católicos, , bajo la supervisión de un
psicólogo o psiquiatra. Los sacerdotes que había abusado sexualmente de menores fueron etiquetados en documentos a los obispos con diagnósticos idiosincrásicos de " sufrir de NEUROSIS MODERADA y FRUSTRACIÓN. "La falta de control sexual fue no deletreado, sino grabado simplemente como "El padre tiene un ÁREA DE DIFICULTAD. ”Otros informes a los obispos "el COMPORTAMIENTO PROBLEMÁTICO DEL padre" y su " GRAVE DEBILIDAD.” (Registro 1974)
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