La resaca más fuerte fue cuando intenté dejar de amarte. No probé gota de alcohol pero mis sentidos estaban anestesiados. Mi corazón no razonaba y mi mente siquiera pensaba, despertaba desorientada las náuseas atoradas y el dolor de tanto pensarte Te llamé mientras lloraba pero sólo en mis sueños. Ya estoy sobria, por fin dejé de amarte. 𝑪 𝑳 8 views゚・Luna‧₊˚, 21:17